El Ayuntamiento de Sant Antoni aprobó ayer por unanimidad la modificación de las tarifas de los taxis, tal y como están realizando otros ayuntamientos de la isla, como el de Eivissa, tras el acuerdo con el Consell. Con esta modificación de las tarifas de estos vehículos, la bajada de la bandera será dos euros. Además, se implantará el taxímetro a todos los vehículos. La aplicación de las nuevas tarifas se realizará antes del verano. Para estas fechas ya han de tener instalados los taxímetro en los vehículos.

El pleno aprobó, además, con el apoyo de Democràcia Pitiusa y la abstención del PP, una moción del Pacte para que el Consistorio rechaze el conflicto bélico en Irak.

Otra de las cuestiones que se abordó fue una moción de control del Pacte sobre la cantera de Sant Rafel. Los vecinos protestaron por los destrozos ocasionados por la extracción de arena. En el pleno se dio a conocer que tras las quejas, los propietarios de la cantera han pedido la autorizacion, ya que para esta actividad necesitan la declaración de interés general. Otra de las cuestiones que se debatió fue el vertido de escombros en el Pla de Sant Mateu. El alcalde, Antonio Marí Tur, aseguró que hay un informe que recoge que «los materiales no eran contaminantes». El portavoz del Pacte, Joan Marí Serra, lamentó que esta actividad la haga «un cargo publico del Ayuntamiento».

DP, por su parte, pidió explicaciones sobre los motivos del Ayuntamiento para acometer las infraestructuras en la calle Herbasana sin contar con el proyecto que costo 3.000 euros.