El Senado aprobó el pasado miércoles la enmienda presentada por el
senador de Eivissa y Formentera, Enrique Fajarnés, para que la Ley
de Acompañamiento de los Presupuestos Generales del Estado de 2002,
en tramitación parlamentaria, incluya una partida presupuestaria
para la construcción de una nueva planta de tratamiento de aguas
residuales en la ciudad de Eivissa.
Fajarnés anunció este proyecto el pasado mes en el acto de
presentación de la candidatura del PP al Consell Insular de Pere
Palau y aprovechando la estancia en Eivissa del ministro de Medio
Ambiente. Según explicó ayer el senador popular, el proyecto se ha
incluido bajo el enunciado «ampliación y mejora» de la depuradora
de Eivissa «porque será un complemento de la que ya existe y que
presenta numerosas deficiencias».
Fajarnés asegura que a pesar de cómo se recoge en el texto,
serán los técnicos los que establezcan cómo hacer uso de esta
partida presupuestaria, puesto son ellos los que deben decir si hay
que crear una nueva planta junto a la existente, como parece lo más
lógico. Esta planta es una constante molestia para los vecinos de
la zona debido a los malos olores que desprende y a los constantes
vertidos.
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