Los actuales horarios de los autobuses públicos de Formentera son un auténtico contrasentido. La oferta es mínima y las combinaciones para desplazarse de un lugar a otro resultan poco menos que imposibles. Los autobuses de la empresa Autocares Paya, concesionaria del servicio de transporte público terrestre en la isla de Formentera, circulan en esta época del año prácticamente vacíos. Tanto es así que en lugar de los habituales autobuses, el servicio se cubre con microbuses. E incluso así, algún conductor ha llegado a decir, medio en broma medio en serio, que se pasea por la isla «sin pasajeros a los que llevar de un lugar a otro».

Este es uno de los argumentos que muchas veces ha esgrimido la empresa para limitar el número de vehículos que funcionan en invierno y para reducir a la mínima expresión las frecuencias horarias en las que opera. Sin embargo, algunos usuarios denuncian la mala planificación y los continuos cambios de horarios como explicación al hecho de que los autobuses -el microbús, porque en realidad sólo trabaja uno- vaya vacío en la mayoría de sus trayectos.

En la cuestión del cambio de horarios, las quejas son absolutamente lógicas. Están plenamente justificadas, puesto que a partir de las fiestas del Pilar el horario de verano se suprimió para habilitar unos horarios que han cambiado, desde entonces y hasta el 7 de noviembre, hasta cuatro veces, produciéndose incluso un cambio de horario el día 5 y otro, el definitivo, el 7, es decir con dos días de diferencia. A ello se suma el hecho de que sábados, domingos y festivos no hay ningún tipo de servicio.

En es Pujols, los usuarios se encuentran con que para ir a Sant Francesc a una hora norma deben partir de es Pujols a las 9,50 y regresar a las 12,15.