Gorgeus en la playa, Gorgeus de fiesta o Gorgeus en el aeropuerto. Este verano, a las ya muchas fiestas que se celebran en Eivissa, se le ha sumado un evento que responde al nombre de Gorgeus (una palabra que se traduce como 'fantástico') y que se ha dirigido a un público mayoritariamente gay. Para dar a conocer todos estos multitudinarios espectáculos es necesaria una imagen: un logotipo, unos colores o unas figuras determinadas que impresas en los flyers publicitarios sean reconocidas de inmediato por sus noctámbulos seguidores.

En el caso de Gorgeus, la promotora de fiestas Paola Cuervo, ha encontrado una fórmula que ha funcionado sorprendentemente bien: «Se me ocurrió que un muñeco muy parecido al de los gays podía servir para anunciar la fiesta. Ese muñeco es carísimo, pero nosotros lo encontramos en el Todo a Cien; en una fiesta en Pachá incluso regalamos 500», explica. A partir de esa idea todo fue muy sencillo. Paola se ocupaba de fotografiar al nuevo protagonista de la noche ibicenca en diferentes y rutinarias situaciones: en la playa, en una moto acuática o con una maleta en el aeropuerto de Eivissa para anunciar la última fiesta del verano. «Buscábamos cosas que hace normalmente un chico gay en el verano de Eivissa», puntualiza esta experimentada promotora.

Pachá, Angel's el Cel o Space son discotecas en las que se ha celebrado este nuevo encuentro festivo cuya imagen de presentación ha triunfado inesperadamente entre su público. «El flyer es muy importante para una fiesta. Yo busco el impacto y una imagen muy limpia, que se vea la fotografía, porque muchas veces la gente no los lee», comenta. A lo largo del verano el periplo de este musculoso muñeco ha dado mucho que hablar. En la publicidad de una fiesta en la discoteca Freek, el muñeco apareció atado con correas y en actitud sadomasoquista, lo que dio pie a que algunos comercios no quisieran colgar los pósters. Algo similar ocurrió con la publicidad de la fiesta de Angel's el Cel, en la que varios de estos juguetes dejaban claras sus preferencias sexuales.

Paola Cuervo lleva 15 años trabajando como promotora de todo tipo de fiestas, antes en Italia y ahora en Eivissa. «He organizado espectáculos que han tenido mucho efecto y que he repetido más adelante», recuerda. En Roma llegó a introducir un coche en un local de la ciudad del que era directora artística. La sorpresa posterior consistía en que unos personajes los destruían. Para otra de sus mejores performances hizo construir una tela de araña de hierro por la que trepaban los bailarines. «Y en Eivissa, en la fiesta que se hizo en Pachá para el día del trabajador, montamos un andamio en el que chicos caracterizados como obreros rompían ladrillos», dice.

Prefiere no repetir sus ideas, pero reconoce que la imagen de Gorgeus se ha hecho famosa y que tal vez sea reclamada el próximo verano. «En los bares había gente a la espera para ver qué haría Gorgeus esa semana», asegura. Opina que en las fiestas de Eivissa la parte gráfica está un tanto marginada, «por la gran cantidad de oferta que hay», y aunque vive de la noche, eso no le impide reconocer y compartir la preocupación de los Ayuntamientos por limitar los miles de flyers que acaban en el suelo. «Aunque"añade"tal vez habría que buscar otra solución».