Los constructores de Pimeef creen que las moratorias son una «disparatada cacería»

Aseguran que la mitad de las empresas tendrán que cerrar a causa de las restricciones urbanísticas

L.F.A.03/02/02 0:00

La Asociación de Constructores de Pimeef tacha la proliferación de restricciones a la construcción como una «disparatada cacería» contra las empresas del sector, cuyas «negativas consecuencias» se empezarán a notar el próximo año «con una importante reducción de la actividad y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo». Al menos así lo manifiestan en una dura editorial recogida por la revista interna de la Pimeef, donde también apuntan que este hecho llevará, a medio plazo, «al cierre de un 50 por ciento de las empresas de las Islas», con el consiguiente «aumento del desempleo del sector, sin que aparentemente la Administración haya tomado las medidas correctoras sobre lo que se avecina».

Los constructores advierten de que no sólo su sector se va a ver afectado sino también «aquellas personas que buscan cumplir con su derecho constitucional a la vivienda». El importante incremento de los costes del suelo motivado por su escasez «va a disparar los precios a niveles muy superiores al resto de España». Los constructores recuerdan que ya en la actualidad el precio del suelo supone entre un 35 y un 50 por ciento del precio final de una vivienda. Además, el manifiesto intenta dejar claro que «echar la culpa de estos incrementos a promotores y constructores sería un error demasiado malintencionado».

El sector de la construcción en Eivissa y Formentera espera que cese «de una vez por todas» la persecución «injustificada y desproporcionada» iniciada desde diversos sectores políticos que, «con una lamentable escasez de miras», se han «lanzado contra la construcción» sin reflexionar sobre el papel de «locomotora» de la economía que se ha desarrollado en los últimos años y sin pensar en el aumento del paro que se va a producir.

«Unos políticos que actúan irresponsablemente y que se llenan la boca para reducir el monocultivo turístico están haciendo lo posible para eliminar el segundo sector económico de nuestras islas y que, para más inri, trabaja todo el año», recalca la asociación que se manifiesta harta de que se les señale como «una fuente de todo tipo de irregularidades e ilegalidades».