Las primeras licencias de construcción cuya tramitación ha sido paralizada por el Ayuntamiento de Santa Eulària han comenzado a llegar a la Comisión Insular de Urbanismo (CIU). Una de ellas pertenece a la empresa Sethome, promotora de un edificio de 34 viviendas en el casco urbano que ha presentado una denuncia de mora ante el silencio administrativo del Consistorio, según explicó ayer el concejal progresista Emilio Pérez Echagüe. El caso ha llegado a la CIU, que ahora «debe estudiar si se subroga la competencia municipal por la que se otorgan las licencias de construcción», explicó Pérez.

El equipo de Gobierno ha optado por frenar la concesión de licencias de construcción hasta que un informe jurídico determine si se puede seguir aplicando el Plan de Delimitación del Suelo Urbano (PDSU), declarado nulo por los tribunales. El alcalde, Vicent Guasch, admitió a este periódico que el temor a las repercusiones judiciales es lo que le ha movido a ordenar la paralización de la concesión de licencias y a extremar la «cautela» en los asuntos urbanísticos.

Durante el pleno de ayer, en el que se debatieron los presupuestos, Pérez Echagüe advirtió al equipo de Gobierno de las graves repercusiones, tanto económicas como legales, que puede tener el hecho de que el Consistorio dé carpetazo a los expedientes urbanísticos sin haber adoptado las medidas legales oportunas: «Aquí -exclamó- se piden licencias y nadie sabe ni cómo ni cuándo se van a dar». Según el edil del Pacte, de seguir esta situación y si algún promotor ve peligrar sus inversiones, «se podría entrar en un proceso de indemnizaciones que le puede costar muy caro a las arcas municipales». Dado el cariz de la situación, el grupo progresista insistió en la necesidad de anular inmediatamente el PDSU.

Los presupuestos para 2002 reflejan un descenso sustancial (del 31'6 por ciento) en el número de licencias que se otorgarán en 2002. El equipo de Gobierno lo achaca a la crisis económica, aunque el interventor reconoce que los servicios técnicos acumulan proyectos como para triplicar las licencias dadas durante el año 2001.