Si la burocracia lo permite, Antoni Prats sustituirá a Pepita Costa
como concejal en el Ayuntamiento de Eivissa a partir del pleno de
finales de este mes. Prats explicó ayer que tiene muchas ganas de
entrar en el grupo municipal y que su objetivo para los dos años
que quedan de legislatura es «ir cogiendo experiencia». «Aprender y
esforzarme para hacer una labor de oposición por lo menos la mitad
de buena de la que hacía Pepita Costa», comenta.
Prats tiene treinta años, es ingeniero técnico industrial y
trabaja en la Pimeef. Se afilió a Nuevas Generaciones en el año
1997, después pasó al Partido Popular y actualmente es miembro de
las ejecutivas local e insular del partido. Hasta hace dos días no
sabía que Costa tenía intención de dimitir, pero el cargo le ha
cogido por sorpresa sólo a medias.
«Cuando me presenté a las elecciones iba en el puesto doce de la
lista. Normalmente, el PP obtenía once concejales, pero a lo largo
de los cuatro años de legislatura siempre hay alguien que deja el
cargo. Era casi como un puesto de salida y siempre he tenido
intención de cubrir la vacante si se producía», explicó ayer. El
nuevo edil del PP reconoce que estar en la oposición siempre
resulta duro para un partido político, por eso cree que su labor y
la de sus compañeros es «hacer una labor bien centrada sobre los
temas que preocupan a Eivissa».
«Y como el Pacte nos da muchas facilidades porque nosotros
creemos que lo hace bastante mal, pues tenemos una labor de
oposición bastante trabajosa», añadió. Prats todavía no sabe en qué
temas se centrará su labor política, pero entiende que habrá que
hacer alguna pequeña reorganización del grupo municipal porque él
no se considera un experto en temas de cultura, en los que Pepita
Costa trabajaba por ser la ex responsable de ese departamento
municipal, el cual ocupó durante ocho años.
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