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El caso abierto por el desplome del bloque de Viajes Barceló vive hoy un nuevo capítulo. Uno de los miembros del consejo de administración de la agencia Viajes Barceló, Pedro Simón Barceló, y un representante de la constructora Saguri, encargada de la reforma cuando se cayó el edificio, declaran hoy sobre las causas del siniestro que se produjo el pasado 27 de enero. Se trata de una vista más del proceso para esclarecer la responsabilidad o no de ambas empresas en el siniestro, que no sólo supuso el desplome del bloque de la agencia de viajes sino que dañó seriamente la estructura del edificio de viviendas y locales comerciales colindante, que permanece desalojado desde hace cuatro meses.

Mientras, los vecinos, tras pasar anteayer una noche durmiendo a la puerta de sus hogares de los que fueron desalojados tras el desplome del edificio, están a la espera de que se produzca alguna novedad sobre el futuro de sus viviendas tras conocer por el Ayuntamiento que se ha iniciado el expediente de ruina del bloque, tal y como se avanzó ayer.

Los afectados desalojados siguen molestos por la imagen de «aprovechados» que se está dando de ellos desde el Consistorio y aseguran sentirse como «trastos o pelotas» por el trato recibido por el Ayuntamiento de Eivissa desde que comenzó el proceso. «Parece -señalaron- que le importa más la imagen pública que el bienestar de los ciudadanos».

El colectivo de afectados asegura que no quiere más que lo que les corresponde. El Consistorio ha mantenido una actitud de «dar largas en todo» a los vecinos.