GUILLERMO ROMANÍ Tan sólo tres de los más de 60 lotes de concesiones de playas que Costas ha concedido en Formentera, tuvieron más de un postor en la subasta pública que tuvo lugar ayer en el Ayuntamiento. Uno de los casos se trata de concesión de hamacas y sombrillas de pequeña cuantía y los restantes se refieren a dos quioscos de la playa de Migjorn: «Las guarachas» y «La sirena gorda».

Mientras los concesionarios del año anterior ofertaron el precio mínimo establecido por la normativa, los dos nuevos presentaron unas propuestas económicas que triplicaban el precio de salida. La antigüedad en la concesión otorga puntos en caso de empate de oferta económica, pero también si se incrementa en un 50% el dinero por la concesión.

A la apertura de plicas, que se prolongó tres horas, asistió el alcalde Isidor Torres, el portavoz de la oposición, Joan Robert Masdeu, la concejala de turismo, Pilar Serra, el interventor y la secretaria. Varios licitantes siguieron el proceso con interés y cierto temor, en algunos casos, ya que desconocían si otra empresa había optado a la concesión que explotaban hasta la fecha.

En el caso de los dos quioscos, al finalizar la apertura de las ofertas, el alcalde notificó que en el plazo de una semana se habrá reunido la comisión que ha de evaluar las ofertas y decidirá a quien se otorga la concesión. La mayoría de las concesiones están en marcha por lo que se puede dar el caso de que antiguos concesionarios tengan que ceder el quiosco a quien el Ayuntamiento decida concedérselo.