La consellera de Consum i Sanitat del Govern de les Illes Balears, Aina Salom, inauguró ayer en Eivissa la nueva sede de la Oficina d'Informació al Consumidor acompañada por el director general de Consum, Miguel Àngel Cabeza, la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, y el alcalde de Eivissa, Xico Tarrés. Aina Salom remarcó que este centro va a propiciar que los ciudadanos puedan «ejercer su derecho a establecer reclamaciones y protestas» en los temas relacionados con el consumo.

La apertura de estas instalaciones «se inscribe -explicó la consellera- en un plan del Govern que propone ir abriendo oficinas del consumidor, a razón de dos por año». De este modo pretenden acercar Balears a la media del Estado Español en cuanto a número de sedes de este tipo, que es de «cuatro oficinas por cada 100.000 habitantes», recordó Salom, que añadió que les gustaría poner oficinas «en todos los municipios» pero que el esfuerzo presupuestario sería demasiado. «De todos modos se irán abriendo más centros», anunció la responsable de consumo en el archipiélago.

Salom cree que se debe concienciar cada vez más a la gente de que «cuando las cosas no están bien hay que protestar». Este servicio, que ya se prestaba en Eivissa de forma local y con un horario menos accesible, amplía su presupuesto a 8 millones por parte del Govern, mientras que el Consell Insular d'Eivissa i Formentera asumirá todos los gastos del personal de la oficina. La actividad de la oficina no es exclusiva para la isla de Eivissa. Así, cada quince días el Ayuntamiento de Formentera recibirá la visita de uno de los trabajadores del centro que tomará nota de las denuncias e informará a los ciudadanos.

La concejala de Salud Pública y Consumo de Eivissa, Cristina Ferrer, señaló ayer su «satisfacción» por la puesta en marcha de la oficina para lo que han empleado «un gran esfuerzo». Pilar Costa destacó el hecho de que se haya «insularizado» el servicio con esta oficina, abierta con la colaboración de Govern, Consell y Ayuntamiento de Eivissa, y que se canalice «uno de los derechos constitucionales del consumidor: la información», aspectos en los que coincidió el alcalde de Eivissa Xico Tarrés que espera que su uso se convierta en costumbre por sus beneficios.