El secretario general de USO, Antonio Llanos, y el representante del colectivo de latinoamericanos, Ramiro Cervantes, presentaron ayer el departamento de inmigración del sindicato con el objetivo general de solucionar la problemática originada por el fenómeno de la inmigración en Eivissa y Formentera. «Teniendo en cuenta -señaló Llanos- que la mayoría de los inmigrantes vienen motivados por la obtención de un empleo, nadie más legitimado para agrupar a este colectivo que una organización sindical».

El secretario general de USO aseveró que el colectivo debe «estar organizado para poder reivindicar sus derechos, dado que su situación es más necesitada porque actualmente en las Pitiüses se están pagando sueldos a los inmigrantes por debajo de los convenios y comparativamente inferiores con otros trabajadores nacionales».

Una de las primeras acciones del departamento será dirigirse al Consell para que ponga en marcha el anunciado Foro de la Inmigración, que todavía no se ha materializado. Con esta y otras acciones esta sección pretende contribuir a la integración «económica, social y cultural de los colectivos inmigrantes»; defender los derechos laborales de los inmigrantes, «combatiendo la discriminación en las relaciones laborales por razón de nacionalidad y raza» y fomentar en la sociedad «una cultura de la tolerancia antirracista, favorable al mestizaje cultural y social».

Ramiro Cervantes puntualizó que actuarán como portavoces del colectivo de los inmigrantes ante la administración pública. El departamento se ha planteado crear una publicación de Eivissa que refleje las actividades del mismo y no descarta establecer colaboraciones puntuales con el Centro de Información al Trabajador Emigrante (CITE) de CC OO.