La precaria situación en la que quedan los trabajadores con contratos fijos discontinuos tras la reforma laboral, las cifras de siniestralidad en Eivissa y Formentera, la falta de una Inspección de Trabajo permanente o la sobreexplotación por falta de personal que denuncia Can Misses son razones suficientes para que los sindicatos UGT, CC OO y USO hayan decidido obviar las diferencias que en otros momentos les han enfrentado y acudir unidos a la manifestación del 1 de Mayo, Día del Trabajo. Así lo explicaron ayer los secretarios generales de USO, Antonio Llanos, de UGT, Diego Ruiz, y de CC OO, José Antonio Carmona.

En un ambiente distendido los tres confesaron no acordarse con exactitud de la última vez que convocaron juntos un acto, aunque la fecha se remonta a tres años atrás.

El secretario general de USO confesó que la decisión de concurrir juntos generó un intenso debate interno en su sindicato pero que, finalmente, concluyeron que «es una oportunidad para decir que los tres sindicatos estamos dispuestos a cerrar filas en torno al problema de la reforma laboral». Por su parte Carmona y Ruiz añadieron que la convocatoria está abierta a todos los trabajadores y asociaciones que se sientan identificados con la causa.

La manifestación partirá a las 12'00 horas de la calle Navarra y continuará por País Vasco, avenida de España y Vara de Rey, donde se celebrará una fiesta en la que se recaudarán fondos para una ONG a través de las consumiciones de los asistentes.