La Concejalía de Bienestar Social de Eivissa ha empezado a ofrecer apoyo a mujeres embarazadas dentro del programa de proyecto de conciliación de la vida familiar y laboral. Ante los buenos resultados de este programa, se ha empezado a realizar un control prenatal a embarazadas que están siendo atendidas desde servicios sociales. «Con un hijo se puede empezar a trabajar antes de que nazca», apuntó Lina Tur, responsable del centro de servicios sociales «Ponent», donde se centraliza el servicio de las otras dos unidades de trabajo social (UTS) de Eivissa: Sa Miranda y calle Castilla.

La educadora realiza funciones de apoyo: se encarga de acompañar al médico a las embarazadas, recordarle que se tiene que hacer las ecografías o recomendarle hábitos saludables. «Hay mujeres que están en servicios sociales, se quedan embarazadas y que estarán solas, es positivo que tengan el refuerzo de la educadora», defendió Tur.

El programa de conciliación, que se puso en marcha en enero de 2000, tiene como objetivo dar apoyo a familias en paro, con problemas para cubrir la parte asistencial y educativa de sus hijos y que necesiten llevarlos a la guardería. La inclusión les permite disponer de tiempo para buscar trabajo, mientras sus hijos están cuidados y atendidos. Durante 2000 se atendieron a 39 niños pertenecientes a 34 familias. Un elevado porcentaje de los casos (64%) corresponde a familias monoparentales: madres con hijos a cargo.

El programa incluye varios niveles de intervención. El primero de ellos es la intervención laboral y técnicas de búsqueda de empleo, tanto en el aspecto individual como en inclusión de grupos organizados. También se trabaja en el aspecto educativo: control del absentismo escolar en guarderías y colegios y seguimiento escolar.