La UCI de Can Misses, recientemente reformada, está preparada para realizar las extracciones de órganos.

La falta de neurocirugía en Can Misses impide que el centro del Insalud tenga sus propios donantes. No hace ni un año que el hospital consiguió la acreditación como centro extractor de órganos, pero los potenciales donantes son ingresados en la Policlínica del Rosario, donde se encuentra neurocirugía, un servicio concertado, además, con el Insalud.

El coordinador de Trasplantes del hospital Son Dureta, el doctor Julio Velasco, que participó como instructor en el curso de reanimación cardiopulmonar celebrado el pasado fin de semana en Can Misses, explicó que «una parte importante de los posibles donantes de órganos mueren por traumatismo cranoencefálico y por hemorragia cerebral, pero no van directamente a Can Misses sino que va a la Policlínica, que es la que tiene neurocirugía», pero no cuenta con con la acreditación necesaria para realizar extracciones de órganos. Can Misses sólo dispone de una proporción pequeña de donantes: aquellos que fallecen por muerte cerebral a consecuencia de una parada cardiaca respiratoria.

El hospital del Insalud en las Pitiüses, además, ha remodelado recientemente la Unidad de Cuidados Intensivos y varios cirujanos de Can Misses se han desplazado a otros centros que realizan trasplantes para adquirir más formación.

Ante esta situación, lo ideal es que exista una colaboración entre ambos centros. El doctor Velasco afirma que para que una persona sea donante de órganos se tiene que llegar al diagnóstico de muerte encefálica. «Es cuando hay que plantearse si un paciente puede ser donante o no» , precisó.