La Comisión de Política Territorial aprobará durante su próxima
reunión el Plan Director Sectorial de Gestión de Residuos Sólidos
Urbanos de las Pitiüses, elaborado por la Conselleria de Medi
Ambient. Posteriormente, será el Consell de Govern el que dará su
visto bueno definitivo. La consellera balear de Medi Ambient,
Margalida Rosselló, aportó ayer estos detalles durante su
comparecencia vespertina ante la Comisión de Ordenación Territorial
del Parlament, ante la que explicó el contenido del plan.
Particulares, asociaciones y administraciones públicas han
presentado diez alegaciones al plan para la Gestión de Residuos
Sólidos Urbanos de las Pitiüses. Además de las alegaciones, 640
vecinos firmaron un manifiesto contrario a la actual ubicación del
vertedero municipal. La mayor parte de las alegaciones se refieren,
precisamente, a la situación del basurero de Roca Llisa, así como a
la valoración económica de la actividad, que varios ayuntamientos
consideran perjudicial para los bolsillos de los vecinos al
encarecer considerablemente la factura por el tratamiento de las
basuras.
Rosselló señaló que una parte de las alegaciones ha sido
aceptada e incorporada al Plan de Residuos, si bien su inclusión no
supone una modificación sustancial del contenido del texto. Durante
las próximas semanas, quiees hayan presentado alegaciones recibirán
un escrito de respuesta específico.
La aprobación inicial del plan tuvo lugar el pasado 20 de
septiembre. A continuación, comenzó su exposición pública, que
concluyó el 4 de diciembre. Se trata de uno de los proyectos en los
que el Govern ha invertido más horas para explicar su contenido: ha
distribuido 57 ejemplares entre instituciones, empresas,
asociaciones y particulares y el director general de Residuos y
Energías Renovables, Nicolau Barceló, ha realizado 12
presentaciones públicas del plan.
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