Un jardín botánico en la Punta de es Molí y la implantación de cuatro huertos ecológicos en otros tantos centros escolares son las dos fórmulas que la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sant Antoni ha proyectado para incentivar y recuperar las variedades hortifrutícolas y de la flora ibicenca.

El 1 de febrero los huertos ibicencos dejará de ser un proyecto para convertirse en realidad. Los centros elegidos para acoger esta iniciativa son Can Coix, Guillem de Montgrí, Cervantes y Sant Rafel. Sus alumnos podrán conocer las especies propias de la isla y aprender los secretos acerca de su conservación y técnicas de plantación.

El segundo de los proyectos pasa por aprovechar el solar adjunto a la Punta de es Molí para ubicar un jardín botánico. El mismo se dividirá por áreas correspondientes a cada tipo de especie. Así, por ejemplo, habrá una zona de bosque u otra de plantas exóticas.

El acto lo presentó el alcalde de Sant Antoni de Portmany, Antoni Marí Tur, el concejal de Medio Ambiente, José Ramón Serra, y un portavoz de la CAM, que colabora en ambos proyectos.