El aquagym o aquatic fitness un deporte relativamente reciente que se ha patentado en Estados Unidos. Su principal característica es que en él se desarrollan ejercicios y movimientos aeróbicos en el agua de la piscina, no en el medio terrestre, lo que, según Gregorio Ribas, monitor de este deporte en Es Raspallar, «evita lesiones y fracturas, además de dar cierta privacidad a los alumnos, ya que su cuerpo está cubierto por el agua».

La pasada temporada este novedoso deporte fue incluido dentro de la oferta deportiva de las instalaciones y resultó ser un éxito. «Ésta es la segunda temporada que impartimos clases de aquagym, y la verdad es que hay muchas personas en lista de espera que estarían interesadas en participar», explica Ribas. La clave de la buena acogida de esta modalidad acuática es, según el monitor, «que se realizan ejercicios cardiovasculares, de tonificación muscular e incluso de rehabilitación con música de fondo y al ritmo e intensidad de cada uno».

En Eivissa, y debido a las características de las instalaciones, se imparte únicamente aquagym de aguas profundas, para lo que es necesario que los participantes se pongan un cinturón de flotación y unos guantes especiales para aumentar la resistencia y equilibrio mientras realizan los diferentes movimientos con los brazos.

En los cuatro grupos formados la mayoría son mujeres que acuden dos o tres veces por semana a las sesiones de 45 minutos para «relajarse». El aumento de la agilidad y tonificación muscular son los principales beneficios de este deporte.