Las rebajas de enero han vuelto a protagonizar una vez más la vuelta a la normalidad una vez pasado el parón de las fiestas de Navidad. Ayer los comercios pitiusos de moda abrieron sus puertas con el gancho de los descuentos de hasta el 50% en sus prendas puestas a la venta.

La jornada de ayer, como suele ser habitual, fue de bastante movimiento sobre todo en las franquicias ibicencas, donde desde primera hora de la mañana acudieron numerosas personas para adquirir prendas mucho más baratas que hasta hace unos días. «Normalmente yo compro en las rebajas porque el dinero cunde más», comentaba Elena en Mango, «y suelo comprar, no porque lo necesite, sino porque me gusta renovar el armario». Corinne, una turista suiza que compraba por primera vez en rebajas en España, comentó que en Suiza «se rebaja el precio mucho más que aquí, hay rebajas de verdad», y señaló que compra en estas fechas porque está todo mucho más asequible.

Frente a la alegría y euforia consumista de la mayoría de los compradores en las diferentes tiendas de moda, se encuentran los responsables de las mismas, que ven como durante estos días, sobre todo al principio, se multiplica el trabajo. Esther y Carmen, de Mango, explicaron que se trabaja el doble, y Rosi, de Only, reconoció que en la última semana, «aunque no hemos vendido mucho, hemos trabajado igual porque la gente venía a la tienda únicamente a probar las prendas que le gustaban y preguntar cuando empezaban las rebajas», hecho que han corroborado las dependientas y encargadas de otros establecimientos.

En la primera jornada de rebajas , los consumidores centraron sus preferencias en las prendas de abrigo, sobre todo chaquetones de piel y jerseys de lana, «porque al principio de las rebajas aunque muchas veces no haya mucho descuento, sí que hay tallas», comentó Lucía. Otros consumidores esperarán a lo largo de los dos meses de rebajas para adquirir la ropa a precios más bajos.