Eva Estévez.31/10/00 0:00
TW0

Los últimos días de octubre y los primeros de noviembre son tradicionalmente jornadas de mucho trabajo para pasteleros y floristas, y, de forma paralela, días de recogimiento y recuerdo para la gran mayoría. En Eivissa y Formentera en particular, y en todo Balears en general, el comienzo del mes de noviembre viene acompañado de la tradicional visita al campo santo y la golosa incursión a las numerosas pastelerías para adquirir los panellets, uno de los postres más típicos del otoño.

En la Casa Marí Vadell de Eivissa, que elabora este delicioso postre desde hace 75 años, en los últimos días su horno elabora kilos y kilos de estos pequeños pastelitos elaborados a base de almendra molida, azúcar y huevo. Concretamente para conseguir 1'8 kilos de panellets se necesita 1 kilo de almendra natural molida, 800 gr. de azúcar y 3 o 4 huevos, ingredientes que se mezclarán bien hasta conseguir una pasta homogénea, a la que se dará forma con las manos y se adornará con piñones o almendra antes de introducir al horno a 170 grados durante 15 minutos.

Numerosas floristerías de las Pitiüses realizan estos días horas extras para poder llevar a cabo los cientos de encargos de ramos y centros para que las tumbas, panteones y nichos estén perfectos para el Día de Todos los Santos. «Estos días los pedidos a los viveros se incrementan un doble y hasta un triple sobre lo habitual», comenta uno de los responsables de la floristería Es Baladre, quien también señaló que el precio del género también crece. Así una rosa de tallo medio puede costar 350 pesetas, 100 pesetas más de su precio habitual, y la docena de claveles pasa de las 900 a las 1.400 pesetas. Aunque los ramos no tienen un precio establecido, pudiendo superar las 15 y 20.000 pesetas, la mayoría de los encargos rondan las 2.500 pesetas, según comentó la propietaria de la floristería Ambiental, utilizando mucho el crisantemo en sus diferentes colores, formas y texturas.