Eivissa busca su 'hermano pobre' en Perú

Con este objetivo, el Consistorio tiene previsto mantener hoy un encuentro con una ONG pitiusa "que va a desarrollar varios proyectos solidarios en el país andino" con el fin de determinar esta iniciativa municipal.

«Hasta la fecha, los hermanamientos con otras ciudades españolas o extranjeras que ha llevado a cabo Eivissa se han basado siempre en contenidos culturales. Tenemos que acercarnos, por ejemplo, al resto de ciudades Patrimonio de la Humanidad, pero no olvidar que esta unión también debe tener una traducción en cuanto a colaboración económica, sanitaria o de educativa», explica la concejala de Ciudad Sostenible de la ciudad de Eivissa. Además, Roldán insiste en la utilidad de estos hermanamientos como herramienta para el «conocimiento mutuo» de los dos países. La relación de las Pitiüses con Perú viene de principios de siglo, puesto que fue uno de los países receptores de la emigración ibicenca, junto a Argentina y Cuba. En la actualidad, en esa nación residen varias religiosas ibicencas, que trabajan en las regiones más desfavorecidas en tareas de ayuda humanitaria.

La elección de la República de Perú responde a la delicada situación, tanto económica como política, que atraviesa el país andino. Su renta per capita asciende a tan sólo 447.700 pesetas, muy lejos de los 2.650.000 pesetas de media en nuestro país, según los datos de la «Enciclopaedia Britannica». También existe un abismo en la esperanza de vida entre los dos países: mientras que los hombres de Perú viven una media de 65.9 años y las mujeres 70.9 años, en nuestros país esta cifra se incrementa hasta los 74.9 años para los hombres y 81.8 años para las mujeres. Su Producto Interior Bruto alcanza los 58.671 millones de dólares, más de 500.000 millones menos que en España.