El buque «Isla de Botafoc» de Umafisa Lines, con 238 pasajeros a
bordo procedentes de Eivissa, tuvo que esperar cuatro horas hasta
poder atracar en el puerto de Barcelona debido al bloqueo que
mantienen los pescadores en protesta por el aumento del precio de
los carburantes.
El buque partió a las 21'30 horas del domingo del puerto de
Eivissa y debería haber atracado en el de Barcelona a las 07'30
horas, aunque finalmente lo hizo a las 11'30. Así, la barrera
formada por las cofradías impide desde las 06'00 horas de la mañana
de ayer la entrada y la salida de embarcaciones de Barcelona.
El presidente de Umafisa Lines, José Torres, descartó ayer
suspender los trayectos a causa del bloqueo. Torres señaló que
estará «a la espera de las instrucciones la Capitanía Marítima y la
Autoritat Portuaria de Barcelona que son los que conocen la
situación». Hasta el momento, el bloqueo «ha provocado la molestia
del retraso en el desembarco, una situación imprevista por nuestra
parte».
Otra de las navieras afectadas por el bloqueo fue
Trasmediterránea. Su buque tipo canguro «Ciudad de Salamanca», con
estrada a las 07'30 horas tuvo que esperar hasta las 11.00 horas
fondeado frente al puerto de Barcelona con 585 pasajeros a bordo
procedentes de Palma de Mallorca. Los pescadores permitieron su
entrada en el muelle a la vez que el de Umafisa.
La «Tras» tampoco tiene previsto suspender sus salidas regulares
desde Eivissa u otros puertos porque «parece que la situación se
está solucionando», confirmaron ayer fuentes de la naviera. Así,
durante la tarde de ayer los pescadores de la Cofradía de Barcelona
aseguraron que mantendrán el bloqueo del puerto debido a las
sanciones administrativas impuestas a las embarcaciones que
participan en esta acción. Sin embargo aseguran que dejarán pasar a
los barcos de pasajeros «para no perjudicar a los usuarios».
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