Al igual que otras muchas familias con viñedos, la de Joan Bonet, propietaria de la conocida Bodega Sa Cova, comenzó ayer a recoger la uva tinta en los viñedos que posee en el valle de Sant Mateu. Desde las nueve de la mañana «hora en la que se condensa la humedad en el valle» Bonet y su equipo, formado por su esposa e hijo y un equipo de seis personas, comenzaron a recoger los racimos de la cosecha del 2000 calificada como «excelente».

En total son siete hectáreas con uvas tintas de las variedades Garnacha, Tempranillo y la autóctona Monastrell o Ull de Llebre, ésta última en mayor cantidad, que en esta cosecha, a pesar de tener mayor calidad que en años anteriores debido sobre todo a la sequía, darán hasta un veinte por ciento menos de frutos, «algo que no ha sido tan malo como pensábamos», comentó Joan Bonet, «ya que al principio creíamos que la producción había descendido en un treinta por ciento».

En Sa Cova calculan recoger hasta el próximo martes alrededor de treinta toneladas de uva con la que se obtendrán entre 20.000 y 25.000 botellas de Vino de la Tierra, «un producto totalmente natural tratado únicamente con estiércol y azufre para fertilizar y proteger a la cepa», aclara Felipe Bonet, hijo de Joan y enólogo de la bodega. «Si somos respetuosos con la planta obtenemos menos uvas pero de mayor calidad», añade Felipe, quien reveló que una buena planta produce aproximadamente entre 3 y 5 kilos de uva.

La decisión de fijar la recolección de la uva en estos días tiene detrás todo un trabajo de análisis, control y muestreo de más de cien cepas diferentes para medir la densidad y posible grado alcohólico de la fruta. Esta labor le corresponde al enólogo de la bodega, Felipe Bonet, quien reveló que «un buen vino se consigue únicamente si la vendimia se ha hecho bien».

A lo largo de toda la jornada de ayer y aguantando estoicamente las altas temperaturas, todo el equipo de recolectores inundó de cajones las diferentes zonas de los viñedos en los que se depositaban cuidadosamente los racimos, hasta 20 quilos por cesta, para transportarlos cuidadosamente en un tractor hasta las dependencias de la bodega.