El Consell Insular d'Eivissa i Formentera ha notificado a los nuevos propietarios de los terrenos en los que se ubica la estructura de la discoteca Trancedance que tienen un mes de plazo para proceder a su demolición, en vista de que dicha obra fue iniciada sin licencia municipal y que, actualmente no hay posibilidad alguna de legalizarla, entre otras cosas porque se encuentra dentro de los terrenos de la Reserva Natural de ses Salines.

La notificación se ha realizado a través del Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) en vista de que ha sido imposible localizar en su domicilio a Nieves Carmona Ruiz, administradora única de la entidad Tanit Paz, SL, que adquirió en marzo de 1998 los terrenos en los que se encuentra el armazón metálico del macroproyecto. La afectada, según consta en la edición del BOIB del pasado martes, tiene un plazo de 15 días para presentar alegaciones si considera que el expediente de infracción urbanística que se le ha iniciado no se ajusta a derecho.

El caso del Trancedance se remonta, en los archivos del Consell Insular, al año 1995, cuando se empezó a estudiar la infracción urbanística y comenzó una larga lista de notificaciones y recursos por parte de los anteriores propietarios, Roberto Alcaraz Martínez y José Luis Pardo Laguna, a los cuales se les había comunicado ya su obligación firme de derribar la estructura y de pagar una sanción económica superior a los 7 millones, aunque esta nueva compra venta retrasará todos los trámites de nuevo.