La población de la isla de Formentera desconoce la oferta de servicios sociales municipales. Ernesto Angulo, de 25 años, subraya esta afirmación un mes después de empezar a realizar su labor como trabajador social del Ayuntamiento de Formentera, después de integrarse en el equipo de la Concejalía de Asuntos Sociales, que dirige María Antonia Ferrer. Junto a Angulo trabajan el psicólogo Ricardo Fernández y la educadora Mónica Rey.

Una persona mayor que vive sola en la Mola y un vecino de Sant Francesc serán los dos casos que atenderán los servicios sociales. Posteriormente, los servicios se ampliarán según la demanda.

El objetivo de Angulo en el área de servicios sociales es crear un ambiente de calidad y bienestar social «paliando cualquier tipo de exclusión social o marginalidad». Añadió, además, que los programas que se han comenzado a llevar a cabo son los del sistema público, que «abarcan información, orientación, valoración, asesoramiento y ayuda domiciliaria». En este sentido, precisó que se ha comenzado a implantar la ayuda domiciliaria con trabajadoras familiares, dependientes de la empresa de servicios sociales Intress, en coordinación con el Patronato de Salud Mental del Consell Insular.

Angulo aclaró que «el servicio de ayuda va dirigido a personas con problemática social y/o familiar, que no tienen posibilidades suficientes de autonomía e independencia para su desarrollo personal». En estos casos se lleva cabo «una intervención sistemática desde diferentes ámbitos y perspectivas, trabajando con la familia para evitar el internamiento en una residencia y lograr que esas personas tengan autonomía e independencia y que la convivencia familiar sea más agradable y con mayor calidad de vida». Su labor se realizará desde tres perspectivas: el trabajo doméstico, la educación y la movilidad de la personas.