Las conexiones marítimas de Barcelona y Valencias con Eivissa que realiza la compañía Trasmediterránea expirarán el 26 de julio de 2001, ya que la Comisión Europea ha considerado ilegal la adjudicación a la compañía marítima en 1998 para explotar nueve líneas marítimas que unen la península con Balears, Canarias, Ceuta y Melilla, según figura en la información publicada por «El País», en su edición de ayer.

La decisión de Bruselas se adopta poco después de la denuncia de la empresa noruega «Freed Olsen», competidora en las líneas que unen la península y Canarias, que argumentaron que los suministradores de esos servicios sólo disponían de 13 días, coincidentes con las fiestas navideñas, para poder presentarse a la licitación pública.

La Comisión Europea sostiene que en el periodo en el que se realizó el concurso «era inadecuado para permitir prepararse a las partes y presentar propuestas, por lo que en realidad no ha habido libre competencia», indica textualmente «El País». El contrato ha sido recortado en casi siete años, de los diez años de duración. No obstante, no se ha anulado en su totalidad por las consecuencias que puede suponer la interrupción de las nueve rutas m marítimas. De este modo, el contrato se mantendrá hasta julio de 2001, por lo que su duración será de tres años y medio. El Estado tendrá que convocar un nuevo concurso público con garantías de competencia.