El Govern ultima la aprobación de moratorias urbanísticas pensadas de manera específica para cada uno de los consells insulars. En el caso de la moratoria urbanística de Eivissa, el último borrador incluía actuaciones en suelo urbano y urbanizable. No obstante, no se descarta que el borrador del llamado «modelo ibicenco» sufra variantes y se acerque más a lo que se está tramitando en el caso de Menorca.

La moratoria de Eivissa será parecida a la de Mallorca. Así, se suspenden las licencias en todo suelo urbano con urbanización consolidada que no cumpla con las condiciones de solar. La moratoria afirma que, para que un terreno pueda considerarse solar deberá tener acceso rodado, abastecimiento de agua, alcantarillado, suministro de energía eléctrica y aceras. Se exige, además, que la urbanización haya sido formalmente recibida por los ayuntamientos. Queda en suspenso el suelo urbano sin urbanización consolidada, si las obras no han sido recepcionadas por el ayuntamiento o falta algún elemento para considerarse solar. Las moratorias de Eivissa y de Menorca se podrían aprobar el próximo día 28 si se mantiene el ritmo de redacción. Tanto en el texto menorquín como en el caso de Eivissa se incorpora una disposición adicional que autoriza la construcción de viviendas en suelo rústico, a pesar de las normas generales.

La moratoria para Mallorca es la que se encuentra menos definida, ya que no cuenta con el beneplácito del Consell. En la institución mallorquina prefieren tomárselo con más calma debido a que la mayor parte de los problemas más acuciantes de la Isla quedaron subsanados con la moratoria que aprobó el Consell durante la pasada legislatura.