Más de medio centenar de denuncias han sido tramitadas por la Policía Local de Sant Josep en lo que han sido los dos primeros días de la campaña de verano para controlar con agentes de paisano la venta ambulante ilegal en el municipio así como el reparto de publicidad no autorizada. La práctica totalidad de las infracciones que se han recogido han tenido lugar en Cala Bassa, Cala Bou y Platja d'en Bossa.

Las unidades de paisano, que comenzaron a patrullar el lunes en el municipio dentro de un servicio especial que ya cuenta con buenos resultados para el Ayuntamiento en veranos anteriores, resolvieron el primer día con más de veinte denuncias y un número similar en el servicio siguiente. Dichas vigilancias se han efectuado en dos turnos.

En total se han cursado denuncias contra 19 personas que fueron sorprendidas comerciando bisutería, 22 tiqueteros, 8 vendedores de fruta y tres que se dedicaban a distribuir latas de refrescos. La cifra total de las intervenciones realizadas por la unidad de paisano llega a 52 actas tramitadas.