La Conselleria de Treball i Formació del Govern de les Illes
Balears destinará 5.000 millones de pesetas durante el período
2000-2003 a la financiación de medidas que impulsen el trabajo
estable, la cohesión social y el fomento de la economía productiva,
tal y como está establecido en el Pacto por el Empleo firmado por
el Ejecutivo autonómico y los agentes sociales.
El presidente del Govern, Francesc Antich, y el conseller de
Treball i Formació, Eberhard Grosske, presentaron ayer un grupo de
ocho medidas tendentes a incrementar en las Islas la contratación
de jóvenes, mujeres, personas mayores de 40 años, personas con
discapacidad y parados de larga duración.
Antich señaló que estas medidas son «el resultado del consenso
de los agentes sociales; van dirigidas a incentivar la economía
productiva en vez de la economía especulativa, por lo que promueven
empleos estables y bien remunerados; el avance en una sociedad que
se caracterice por tener puestos de trabajo de calidad, y que
atienden a los segmentos de la población que tienen más
dificultades para acceder al mercado laboral». Grosske añadió que
estas ocho medidas forman parte de las 90 actuaciones que están
previstas en el Pacto y que hacen referencia expresa a los sectores
más desfavorecidos.
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