Algún vándalo ha dejado patente su disconformidad con las zonas
azules de Eivissa de la forma más expeditiva: rompiendo los
parquimetros que las deben regular.
Apenas cuatro días después de que comenzaran a funcionar en
varias calles de la ciudad, un mínimo de cinco de estos aparatos
aparecieron ayer por la mañana inutilizados en la calle Bartolomé
Rosselló y en las inmediaciones del paseo Vara de Rey.
El autor "o autores" de la gamberrada han seguido el mismo
esquema para inutilizar todos los aparatos: han incrustado un trozo
de madera en el orificio en el que se deben insertar las monedas y
por el que se expide el comprobante. Después, los han sellado con
un buen chorro de silicona.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.