El equipo de gobierno del Consell Insular ha salido al paso de las acusaciones lanzadas por el PP de este organismo, que apuntó que las Pitiüses podrían dejar de recibir 700 millones del Govern porque estas partidas presupuestarias no están justificadas documentalmente. El Pacte asegura que esta cantidad llegará al Consell antes de que finalice el ejercicio presupuestario del año 2000, «que acaba el 31 de diciembre y no el mes de mayo», apuntan.

El equipo de gobierno no se limita a aclarar las acusaciones del PP sino que matizan que «en ocho meses el Govern progresista ha hecho más por las transferencias que durante los veinte años de mandato del PP». Prueba de ello es, según el Pacte, que el actual Govern balear «ha tenido que incluir en los presupuestos del 2000 una partida adicional para los consells insulares a fin de compensar la pésima dotación económica con la cual habían sido transferidas diversas competencias por parte del Govern autonómico del PP».

Por otra parte, aseguran que el PP «ha estado totalmente incapacitado para aprobar un sistema definitivo de financiación de los consells durante veinte años, a pesar de que la Ley de consells obligaba a hacerlo, lo que demuestra el interés de los populares por esta cuestión».