El Juzgado de lo Social de Eivissa ha dictado una sentencia en la
que se levanta la sanción impuesta por la subdirección general de
Relaciones Humanas del Ministerio de Medio Ambiente a un
funcionario de la oficina de Costas en Eivissa que denunció el
comportamiento y los insultos recibidos por parte del delegado de
la Demarcación en la isla.
La sentencia revoca el castigo de un mes de suspensión de empleo
y sueldo impuesto en su día a un técnico práctico de control y
vigilancia de obras a raíz de la denuncia que presentó ante el
juzgado por recibir un «tratamiento vejatorio e insultante» por
parte del delegado insular de Costas, Luis García Roy.
Estas denuncias, que quedaron probadas tras un juicio celebrado
en la isla, motivaron la imposición de una falta grave que le
supuso al denunciante la suspensión de empleo y sueldo de un mes
que ahora ha sido revocada en virtud de esta última resolución
judicial.
La polémica entre el funcionario de Costas y los responsables de
la Demarcación de Balears se inició hace unos meses a raíz de una
denuncia sobre la persona que ejerce en Eivissa las funciones de
delegado de Costas, que fue acusado de ejercer «un tratamiento
despótico» hacia el personal de la oficina de Costas.
Con esta nueva sentencia hecha pública por el juzgado de lo
Social de Eivissa acaba el enfrentamiento legal abierto entre las
dos partes litigantes, Costas y un funcionario de esta Demarcación,
con el resultado final de que éste último ha visto reconocidos sus
derechos laborales en los tribunales ibicencos frente a lo
estipulado en la sanción de la subdirección general de Relaciones
Humanas.
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