NIEVES IBARRONDO Las «Diades de patins» comenzaron ayer en el recinto ferial de la mejor forma posible. Éxito de participación (más de 200 personas) y organización fueron los dos aspectos que coincidían en recalcar los promotores de esta experiencia, pionera en la isla.

Promovida por la delegación de patinaje y el Consell Insular la iniciativa pretende dar respuesta a una añorada reivindicación del Club de Patinaje sobre un área adecuada para practicar esta disciplina. Alfonso Lapuente, presidente de la entidad, mostró su interés porque la propuesta llegara a calar entre el millar de aficionados que se calcula existe en las Pitiüses: «Así podría prosperar la idea de una pista para los aficionados», señalaba. Para Ricardo Gómez, técnico deportivo, el aspecto ofrece, además, otra cara: «La normativa obliga a los patinadores a ir a idéntica velocidad que los viandantes en la acera, lo que justifica por sí solo la necesidad de un lugar».

Los 3.800 metros de las instalaciones se distribuyeron en dos zonas de diversa dificultad a cuyo cargo estaban siete monitores. Alquiler de equipos, competiciones extra oficiales, bar y el «Ready to be a winner» como música de fondo completan un diseño que se repetirá de diez a dos durante todos los domingos de mayo.