Todos los estudiantes del instituto Marc Ferrer de Formentera se sumaron ayer a las actividades programadas para celebrar su anual diada cultural. La organización preparó una intensa jornada que no dejó ni un momento de descanso al más de centenar de alumnos que cursa estudios en este centro. Una vez entregadas las notas del trimestre, los chavales disfrutaron de un día atípico, en el que las fiestas sustituyeron, por sólo 24 horas, a los libros y profesores.

Así, los estudiantes tomaron todas las clases para participar en actividades tan amenas como un taller de cocina "que se organizó en el bar del instituto", otro de reciclaje de papel o un concurso de redacción. Además, los alumnos demostraron su dominio de las técnicas de fotografía en una muestra que se desarrolló en el hall del centro y en la que los jóvenes exhibieron algunas imágenes de rostros distorsionados.

Mientras, en la pista polideportiva anexa al centro varios estudiantes competían en los torneos de voleibol y baloncesto organizados para la ocasión. Poco metros más allá varios alumnos aprendían cómo se realiza el anillado de las aves para su posterior seguimiento o participaban en un taller para teñir camisetas.