El ex presidente del Govern y presidente del PP balear, Jaume Matas, negó ayer su presunta vinculación con el caso de espionaje informático al Consell de Mallorca en la época en la que presidía el Govern y aseguró que estas acusaciones se han producido como consecuencia de las elecciones, «después de que un partido haya perdido más de 40.000 votos, de un pacto a la balear que fracasa y de un Govern que no se dedica a resolver los problemas de los ciudadanos».

El ex presidente afirmó que a ningún responsable político «se le pasaría por la cabeza realizar este tipo de actuaciones» y consideró que un presidente del Govern «no se puede dedicar a decir estas tonterías». Matas, quien aseguró que los hechos demostrarán que se trata de acusaciones sin sentido, consideró que el único objetivo del Govern es «tapar su incapacidad, inoperancia y parálisis». Matas indicó que el Govern ha estado ocho meses investigándole sin hallar actuaciones incorrectas. «Si creen que hay irregularidades, que lo denuncien, pero que no se dediquen a sembrar dudas absurdas», afirmó.

Matas explicó que sus asesores le han aconsejado que presente una querella por calumnias. «Pero prefiero ser cauto, porque no soy partidario de hacer política de esta forma». El ex director general de Noves Tecnologies, Juan José Novas, aseguró que el sistema informático del Govern no es capaz de realizar un «pinchazo» como el sufrido por el ex presidente de la Comissió Insular d'Urbanisme.