El conseller de Treball, Eberhard Grosske, animó ayer en Eivissa «a la gente progresista a que vaya a votar, que no permita que un país progresista tenga cuatro años de gobierno conservador». Explicó que este hecho «tan perverso lo permite una ley electoral que prima indebidamente al partido mayoritario». Grosske recordó, en este sentido, que el programa electoral pactado entre PSOE y Esquerra Unida prevé una reforma de la ley electoral.

Aludió al mitin del PP en Cas Serres del 6 de marzo donde se criticó la defensa a ultranza de la lengua catalanma por parte de algunos integrantes del Pacte. «Me parece patético que no tengan otros recursos y que para arañar cuatro votos atemorizados intenten agitar el fantasma de la división lingüística, porque eso contribuye a la fractura social de una comunidad plural como las Pitiüses», indicó. Grosske se refirió al «pucherazo de Formentera» y añadió, además, que «no hay que votar a gente que hace una política de caridad con las pensiones, es triste mantener un país en el que sobreviven miles pensionistas con pensiones indignas».