«Estamos hartos. Hay drogas, perros sueltos y suciedad por todo». Esta es una de las opiniones de los vecinos de la zona próxima a la urbanización «Pinosol» para referirse a los 'okupas' que viven en este lugar, antaño una zona militar. seguran que son muchas las quejas y denuncias presentadas por los vecinos de la urbanización situada a la entrada de Santa Eulària. «Los vecinos están sembrando tomates, pero ellos se los quitan y también roban la fruta», asegura un vecino de la zona, que se negó a facilitar su nombre por temor a las represalias.

Añade el anónimo denunciante, que se queja de la acumulación de la basura, un coche abandonado y del aspecto que presentan los habitantes de la urbanización semiabandonada: «Si ves los fachas que suben y bajan por el camino, no da asco, sino miedo». Asegura que en una ocasión tuvo que retirar a unoa del camino que se había quedado dormido. El portavoz de los vecinos afirma que presentaron denuncias a la Guardia Civil, pero que no les ha hecho caso sino al contrario: «Ellos están cortando pinos y nadie les dice nada. Nosotros cortamos un pino en un sitio de la huerta y enseguida llegó la Guardia Civil».

A escasos metros de las casas de los pagesos se encuentra la urbanización que ha provocado esta discordia. Uno de los 'okupas' niega las acusaciones e incluso acusa a sus 'vecinos' de impedirle el acceso colocando ramas en la mitad de los caminos. Añaden que han impedido que los vecinos traten parcelar la zona y aconseja que se haga un parque para que la gente venga a pasear: «¿Se da cuenta de la tranquilidad que hay?», pregunta. Vecinos y 'okupas' mantienen sus diferencias, como cualquier comunidad.