La comunidad escolar del ayuntamiento de Sant Joan y La Consolación en Eivissa celebraron ayer el Día Escolar de la No Violencia y la Paz con una serie de actividades y actuaciones con un eje común: la apuesta por la paz, la solidaridad y el diálogo.

El Colegio Público de Labritja fue el escenario de la trobada de todos los alumnos del municipio de Sant Joan. En él, alrededor de 370 alumnos procedentes de Sant Miquel, Sant Llorenç, la Guardería Municipal y los propios del centro en el que se organizaba la fiesta se dieron cita desde las 9'30 horas de la mañana para celebrar de forma conjunta uno de los días más señalados dentro del calendario escolar, que coincide con la muerte de del Premio Nobel de la Paz Ghandi. Paralelamente, en La Consolación, en cuya entrada destacaba una hermosa paloma blanca sobre fondo rojo, los alumnos portaron numerosos murales alegóricos y celebraron una fiesta en la que no faltaron ni los disfraces.

Las actividades diseñadas por los claustros de profesores de Sant Joan comenzaron con una serie de trabajos en conjunto por grupos y cursos en las aulas, en las que se redactaron e intercambiaron mensajes pacíficos. También hubo tiempo para los juegos, una forma divertida de inculcar los valores de uno de los sentimientos más universales. Esta primera toma de contacto entre los niños dio paso a un desayuno multitudinario en el hall del colegio donde pequeños y mayores dieron buena cuenta de una calentita chocolatada acompañada de una deliciosa coca casera, que sirvió para entrar en calor y dar paso a las actuaciones que con posterioridad se desarrollaron en el patio del Colegio de Labritja.

A pesar de que el día amenazaba lluvia con un cielo completamente gris, los escolares de Sant Joan desarrollaron todo su programa por la paz. El momento dedicado a la lectura de los manifiestos fue uno de los más emotivos. Alumnos de todos los cursos de los distintos centros desfilaron uno a uno ante el micrófono para dar a conocer sus ideas y opiniones sobre la paz y su importancia para la buena marcha del mundo. «El día de la paz son todos los días», «la guerra contra la paz es como un flecha», fueron algunas de las consignas que culminaron en una sola: el Himno de la Alegría, que fue coreado por todos los niños y niñas cogidos de la mano junto a sus profesores.

Los acordes del 'Jo vull la pau' dieron paso a un baile conjunto en el que alumnos de Infantil, Primero, Segundo y Tercer Ciclo formaron círculos concéntricos al ritmo de la música, dando paso quizás a una de las actividades más simbólicas de la mañana: la suelta de 4 palomas.