Los miembros de la Asociación de Transporte de Eivissa decidirán en una próxima asamblea general que se celebrará el viernes, 21 de enero, si se suman o no a la huelga del transporte convocada a nivel nacional por las patronales del sector. La falta de subvenciones al gasóleo profesional, tras el aumento de los precios de este combustible a lo largo del último año, (cifrado en un 18'97 por ciento) es el principal motivo de la adopción de esta medida de presión.

La huelga se extenderá desde la madrugada del 26 de enero hasta la medianoche del 28 del mismo mes, lo que supone un total de 72 horas de paro continuado del sector.

El presidente de la asociación, Juan Bufi Riera, señaló ayer que les preocupa «muchísimo» el tema del aumento de precios porque, de seguir al mismo ritmo, dejarán de obtener beneficios en breve o, como contrapartida, se verán obligados a subir las tarifas «ya que ahora están congeladas». Por su parte, la Federación Balear de Transportes ya ha amenazado con sumarse al paro, lo que provocaría el colapso de la actividad económica de las Balears, al inmovilizar un total de 4.500 camiones, 2.000 autocares y unas 200 ambulancias.