GUILLERMO ROMANÍ El personal sanitario del centro de salud de Formentera ha protestado por el frío existente en estas dependencias. La situación es tal que los facultativos acuden a su lugar de trabajo provistos de radiadores y estufas de su propiedad para instalarlo en sus consultas. El problema estriba en el sistema de refrigeración del centro de salud que se estropeó a finales de verano, fue reparado a mediados de otoño pero ha vuelto a fallar.

El coordinador del centro, Isidor Costa, que se encuentra de baja por enfermedad, confirmó esta situación y aseguró que él es uno de los médicos que se llevan el radiador al centro de salud. Además, los especialistas que se desplazan de Eivissa al centro de salud de Formentera pasan la consulta con abrigo, guantes y bufanda. El personal sanitario y administrativo ha ido sucumbiendo por el frío. Hay bajas por gripe y se dan casos de afonía.

La situación repercute también en el servicio a los usuarios que permanecen en la sala de espera ateridos de frío y se quejan cuando se tienen que despojar de la ropa para que les hagan un reconocimiento. Las condiciones son aún más extremas cuando se trata del servicio de urgencias por la propia configuración del mismo. A esto se suma la existencia de goteras, algunas de ellas están en la propia sala de espera y deben de ser controladas colocando toallas en el suelo para que el agua no corra por el piso.