La concejala de Fiestas del Ayuntamiento de Eivissa, Sandra Mayans, inauguró ayer oficialmente las celebraciones de Navidad con el tradicional acto de encendido de luces en Vara de Rey. La regidora se vio respaldada por gran parte del grupo de gobierno municipal (Maurici Cuesta, Pedro Campillo o Cristina Ferrer, entre otros, acudieron a s'Alamera) y numeroso público que aguantó estoicamente la amenaza de lluvia.

Una invitación formal para acudir al Recinto Ferial en el evento que ha organizado el consistorio para dar la bienvenida al nuevo año y el deseo «de que estas fechas sirvan para unirnos más a todos» completaron el discurso de la responsable local. Los espectadores se vieron recompensados con una sorpresa final: el descubrimiento de un reloj que desgrana la cuenta atrás de las horas que restan para el año 2000. Una traca final cerró el conjunto y condujo a los presentes hacia la manifestación de protesta contra el fin de la tregua terrorista en el Parque de la Paz.

A la iluminación se sumó el pasacalles protagonizado por la Banda de Música Ciutat d'Eivissa y la Banda de Música de Felanitx, quienes, tras interpretar varias piezas, se intercambiaron unas placas. Y junto a las bombillas, el mercadillo de Navidad cobró vida en virtud de seis puestos a los que ya desde por la mañana se habían acercado numerosos curiosos, a falta aún de ubicar muchos de sus productos.