El conseller d'Obres Públiques del Govern balear, Josep Antoni
Ferrer, aseguró ayer que el cónsul británico en Balears ha
solicitado un especial control de la carretera Eivissa-Sant Antoni
durante la Navidad, ya que tiene conocimiento de que las discotecas
que se encuentran a ambos lados de esta vía abrirán sus puertas
para celebrar las fiestas por todo lo alto. El conseller señaló que
esperan que la Guardia Civil colabore para que esta carretera sea
especialmente controlada durante estas fechas.
Ferrer señaló, en respuesta a una pregunta planteada por el
diputado ibicenco Miquel Ramon, del grupo parlamentario de Esquerra
Unida, que el Govern está trabajando para solucionar los problemas
que tiene esta carretera, considerada una de las más peligrosas del
archipiélago.
El conseller indicó que se está mejorando la ubicación de las
paradas de autobuses y que se estudia la posibilidad de ubicarlas
dentro del recinto de las discotecas. Por su parte, Miquel Ramon
solicitó al Ejecutivo que las obras de mejora se lleven a cabo lo
antes posible en vista de las trágicas cifras que registra esta
carretera. Ramon, que indicó que esta zona se ha convertido ya en
una especie de 'ruta del bacalao', recordó que esta temporada ha
habido al menos seis atropellos que han costado la vida a turistas
que cruzaban esta vía.
Ramon considera especialmente urgente que el Govern tome cartas
en el asunto cuanto antes a la vista de la falta de predisposición
de las salas de fiestas a colaborar en el arreglo de la carretera.
«Las discotecas ya manifestaron que no se consideran responsables»,
dijo.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.