El último pleno de Sant Antoni se convirtió en el más polémico de este principio de legislatura, tras negarse el alcalde a debatir las mociones presentadas por la oposición municipal. Foto: VICENÇ FENOLLOSA.

Antoni Marí Tur (Partido Popular) seguirá siendo alcalde de Sant Antoni, no tanto porque lo quieran así sus opositores sino más bien porque no se ponen de acuerdo. El partido que tiene la llave de gobierno en este municipio, Democracia Pitiusa, no tiene intención de mover ficha para derrocar al PP, aunque su máximo responsable, Vicente Marí Prats, reconoce que el momento «era bueno porque el PP había autoexcluido a los demás».

Marí Prats se mostró ayer muy disgustado con la manera de actuar del Pacte Progressista, que planteó públicamente el pasado lunes la posibilidad de que fuera Democracia Pitiusa quien se dirigiera a ellos para aceptar la oferta de acuerdo que ya plantearon después de las elecciones del 13-J. «Yo entiendo al PP, porque lo que les pasa es que todavía no se han dado cuenta de que no tienen mayoría absoluta. A los que no entiendo es a los del Pacte; las circunstancias han cambiado y claro que es necesario volver a hablar y poner muchas cosas sobre la mesa», explicó ayer Marí Prats.

El número uno de Democracia Pitiusa, cuyo partido tiene dos ediles en el Consistorio de Sant Antoni, cree que si la izquierda está interesada en que prospere una posible moción de censura «la forma de plantearlo no es haciendo declaraciones en los medios de comunicación». «Es curioso porque parece que somos los únicos capaces de inclinar la balanza o de dejar que siga de la misma manera y, sin embargo, no nos han dicho nada. Lo único que puedo decir es que no lo entiendo», reiteró Marí Prats.