La procesión se desarrolló por los alrededores de la iglesia de Sant Rafel.

La localidad sanantoniense de Sant Rafel celebró ayer el día grande de sus fiestas patronales con un rotundo éxito de participación.

Los actos comenzaron bien temprano, a las ocho, con el tradicional repique de campanas que debía despertar a todos los vecinos. Las competiciones deportivas se sucedieron a lo largo de la mañana. A la una de la tarde, el obispo de la diócesis de Eivissa y Formentera, Agustín Cortés Soriano, ofició una misa en la iglesia de la localidad. Al oficio religioso asistieron, entre otras autoridades, la presidenta del Consell Insular d'Eivissa i Formentera, Pilar Costa, el alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur "quien acudió acompañado de la corporación municipal en pleno" y la consellera de Cultura i Esports de la máxima institución pitiusa, Fanny Tur.

Tras la misa, los jóvenes del pueblo sacaron a espaldas todas las imágenes de santos que guarda la iglesia. La procesión fue seguida por una parte del numeroso público que se congregó en el templo.

Una vez guardadas las tallas en la iglesia, una colla se encargó de ofrecer un espectáculo de ball pagès, mientras la organización repartía bunyols y otros productos típicos entre los espectadores.