Es Cubells celebró ayer su día grande con la tradición como protagonista. Misa solemne y procesión, ball pagès a cargo del Grup Folklòric des Cubells, degustación de sangría y bunyols y verbena popular que corrió a cargo de «La banda den vinaxa» barcelonesa fueron los actos que se pudieron ver a los largo de una jornada que contó, eso sí, con un elemento nuevo: la luz artificial. Y es que el desarrollo del programa en la festividad de Santa Teresa se hizo en medio de la noche, ya que a las siete, momento en que comenzó la eucaristía oficiada por el párroco de la localidad, la oscuridad comenzaba a hacerse protagonista. Numeroso público asistió, pese al desacostumbrado horario, a contemplar y degustar los productos del convite. Tampoco faltaron las autoridades locales entre las que se encontraba el alcalde de Sant Josep, Josep Serra Escandell, que tuvo una dedicatoria especial para los vecinos: «Me gustaría felicitarles a todos en unas celebraciones como estas en el seno de un pueblo hermoso y significativo a nivel del municipio. Especialmente me gustaría destacar la labor de la asociación que ha hecho posible esto». Serra, que recibió una calurosa acogida por parte de los espectadores, acompañó a sus paisanos en el recorrido a pie. Terminado el camino, los miembros del conjunto de baile -que precisaron la participación de los jóvenes de Sant Josep ante la falta de hombres en la formación- mostraron su elegancia con los trajes típicos, entre ellos el más antiguo de camisola, al son de las castañuelas. Mientras, los más jóvenes se entretenían con algodón de azúcar y manzanas de caramelo.

El grupo valenciano «Dimonis de Massalfar» pondría el punto y seguido a las once y media de la noche a unas celebraciones que tienen su continuidad hoy a partir de las ocho y media en la II Cantada a sa Serena y, mañana domingo, con la Festa Pagesa a sa Font d'en Xiquet desde las siete de la tarde. Un fin de semana en el que se han multiplicado los eventos, culminando cerca de dos semanas de homenaje.