Ses Salines de Eivissa y Formentera son uno de los espacios
naturales más amenazados del Estado, según el estudio realizado por
la Sociedad Española de Ornitología (SEO-Birdlife). Esta
organización, integrada dentro de una de las mayores asociaciones
ecologistas del mundo, ha elaborado un listado de los 33 «puntos
negros» para la conservación de las aves, entre los que figura ses
Salines.
Entre los principales problemas que padece la Reserva,
SEO-Birdlife cita «la fuerte presión urbanística en Eivissa, donde
proliferan las casas ilegales y hay varios proyectos de
urbanizaciones». Los ecologistas también denuncian la existencia de
numerosos tendidos aéreos en la reserva, «que causan la
electrocución y colisión de aves como el águila pescadora, el
flamenco o la cerceta pardilla, entre otras especies».
Precisamente, la semana pasada Gesa comenzó a soterrar uno de los
tendidos más problemáticos, el de es Codolar, gracias a una
subvención de Parques Nacionales requerida por la dirección de la
Reserva.
Otro de los motivos de preocupación de SEO-Birdlife es la caza
furtiva y «la presencia incontrolada de turistas, que producen
molestias a las aves reproductoras». Los ecologistas destacan,
además, el expolio de huevos y pollos de pardela balear en el
islote de s'Espardell.
Las obras de mantenimiento de las salinas de Eivissa, con
maquinaria, también causan molestias a las aves invernantes.
Finalmente, SEO-Birdlife resalta el conflicto entre la
administración central y la balear por la gestión de ses Salines,
pendiente de una sentencia del Tribunal Constitucional que con toda
seguridad dará la razón al Govern de las Islas.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.