Las familias y los niños llenaron la sala de plenos del Consell Insular. Foto: V. Fenollosa

Las vacaciones europeas de los 41 niños saharauis llegarán mañana a su fin. De momento, todavía están apurando las últimas actividades en las Pitiüses. Ayer por la tarde tocó recepción en el Consell Insular.

Al acto "que se celebró en la sala de plenos de la institución, abarrotada hasta los topes" asistieron la presidenta, Pilar Costa, el conseller de Interior del Govern, Josep Maria Costa, y el conseller de Economia de la máxima institución pitiusa, Josep Marí Ribas, entre otros.

Pilar Costa recordó en su parlamento "que tuvo que interrumpir a causa de unas lágrimas que empañaron sus ojos" sus visitas a los campamentos de los saharauis, quienes viven en unas condiciones infrahumanas. Además, la presidenta expresó su deseo de que el referéndum por la determinación de este pueblo se celebre, finalmente, en el 2000, después de varios años de retrasos. Por su parte, Josep Maria Costa agradeció a todas las familias pitiusas que han participado en esta iniciativa al acoger a algún menor en sus casas. Además, el conseller se refirió a todos los hijos de éstas, que han superado «los primeros momentos de recelo hacia el extranjero para acabar con una profunda amistad».