El conseller de Interior, Josep Maria Costa, se reunió ayer con los concejales de policía de los diferentes municipios de las Pitiüses. FOTO: V.F.

CONCHA ALCANTARA Colaboración y coordinación entre todas las instituciones para velar por la seguridad de los ciudadanos. Ese fue el mensaje transmitido ayer por el conseller d'Interior del Govern Balear, Josep Maria Costa, a los concejales y jefes de policías locales de las Pitiüses en este primer encuentro tras el cambio de gobierno. El conseller d'Interior defendió la revisión de la normativa que regula las policías locales y señaló que «es necesario un estudio para actualizar y establecer una normativa innovadora y progresista que permita adecuar la coordinación de las policías locales».

Acompañado del director general d'Interior, Antoni Torres, y el vicepresidente primero del Consell, Vicent Tur, Costa planteó «un tema de debate y reflexión» en referencia a la configuración actual de los municipios respecto a la situación geográfica: «Un turista o ciudadano de la Bahía de Sant Antoni o de Platja d'en Bossa no sabe donde comienza o acaba el límite, difícilmente encuentran un límite geográfico». De este modo, sugirió que se deben de estudiar mecanismos para que los servicios de seguridad vayan mejorando para los ciudadanos no se encuentren que «un policía esté parado porque ha llegado a una calle en la que le han dicho que no tiene competencias». Costa abordó este asunto con anterioridad con Vicent Tur y ambos coincidieron en la necesidad de reflexionar en este tema: «No voy a entrar en un debate de límites territoriales, pero desde un aspecto policial son artificiales», afirmó.

Entre los objetivos más inmediatos de la Conselleria d'Interior figura hacer una convocatoria de carácter extraordinario para pruebas de ingreso a la policía local, «la falta de personal es evidente», señaló.