Elle McPherson, junto a su preparador físico bajo el tradicional monumento a Colón que decora la entrada a Sant Antoni. Foto: JULIÁN AGUIRRE.

Elle McPherson llega cada día a primera hora al gimnasio Fraile de Sant Antoni. Viene acompaña de su preparador físico, quien le asesora y aconseja sobre los ejercicios que debe practicar. Todo comienza con una sesión de estiramientos para desentumecer sus músculos; hay de todo, para los brazos, sus inmensas piernas, el juego de hombros y la nuca.

Seguidamente, «el cuerpo» se sube a la cinta de correr para entrar en calor. Durante unos 15 minutos y a una velocidad progresiva, Elle recorre unos cinco o seis kilómetros, algo que deja constancia de que se encuentra en plena forma física, a pesar de ser ya toda una madraza desde hace unos pocos meses. Eso sí, la maternidad le ha sentado maravillosamente y de cada día está más guapa, como pueden comprobar los televidentes todos los días con el anuncio que protagoniza para una conocida marca de yoghurt.

El entrenamiento sigue con una intensa tabla de ejercicios con aparatos y que comienza por los brazos, que ejercita levantando unas pocas pesas.
Acto seguido se dedica a fortalecer sus piernas con diversas máquinas, en las que dedica unos minutos a perfilar sus rodillas, tobillos y glúteos.
Pasa después, ya para acabar, a una dura sesión de movimientos en la que se implica cada centímetro de su musculoso cuerpo.
En menos de una hora, Elle tiene tiempo de cultivar su cuerpo, quizá el más deseado del mundo de la moda. Envidiada por las mujeres y soñado por los hombres, «el cuerpo» posee un fuerte temperamento, que sale a la superficie ante los reporteros gráficos que intentan captar una imagen de sus vacaciones.

A PEDRADAS
Desde que comenzó el verano, Elle ha protagonizado alguna de las noticias del estío, y no precisamente por sus vida profesional, sino tristemente por sus desencuentros con los paparazzi. Hace tan sólo unas semanas, Elle se enzarzó en una pelea "en la que volaron varias piedras hacia los periodistas" con toda la prensa que trataba de captar una instantánea de la modelo junto a su hijo. La cosa no acabó ahí, puesto que su marido, al ver la escasa puntería de su mujer, intentó atropellar con su automóvil a un fotógrafo.