«Nosotros solos no podemos hacer nada, todos tenemos que poner de
nuestra parte para que no haya un índice tan alto de accidentes».
De este modo se expresaba ayer Paz Vázquez, jefa local de Tráfico,
al referirse al número de siniestros mortales sucedidos en lo que
va de año en Eivissa y Formentera y, concretamente, a los que han
tenido lugar en poco tiempo entre los kilómetros 5 y 6 de la
carretera de Eivissa y Sant Antoni y que han costado la vida a
cuatro personas.
Vázquez opina que este tramo de carretera es uno de los puntos
negros de la circulación en Eivissa. La jefa local de Tráfico
remarca el hecho de que poco puede hacerse si la gente cruza la
carretera sin tomar precauciones o los conductores no respetan las
normas de seguridad. «En esa zona se concentran la mayoría de
controles de la Guardia Civil, pero no podemos estar detrás de cada
persona que cruza la calle en aquel lugar», apunta.
Las cifras oficiales de víctimas en las carreteras pitiusas
sitúan el número de fallecimientos en 19, mientras que en todo el
año 1998 ocurrieron 17 muertes a causa de accidentes de tráfico.
Unas cifras que reflejan el aumento en la mortalidad en las
carreteras que señala la estadística a nivel balear: 75 fallecidos
en todo 1998 y 96 en lo que lleva transcurrido de 1999. «No vamos
por muy buen camino», comenta Vázquez.
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