Formentera ha sumado dos comercios más al catálogo de ‘Emblemàtics Balears’, impulsado por la conselleria de Empresa, Ocupación y Energía, a través de la Dirección General de Empresa, Autónomos y Comercio del Instituto de Innovación Empresarial de las Islas Baleares (IDI), y con la colaboración del Consell. Así, Formentera cuenta ya con ocho establecimientos emblemáticos.

El proyecto Comerços Emblemàtics de les Illes Balears nace de la necesidad de proteger la actividad comercial de proximidad y, más concretamente, la de los establecimientos con más tradición de los municipios. Uno de los objetivos de este proyecto es dar a conocer la singularidad de cada municipio a través de sus establecimientos emblemáticos.

Can Forn.

Los nuevos comercios adheridos a este catálogo son Can Forn (supermercado) y Macramé Ferrer (moda).

Los establecimientos de Formentera que ya formaban parte del catálogo son: Forn Can Jeroni, arraigado con historia; Forn Can Manolo, emblemático; Forn Sant Ferran, arraigado con historia; Llibreria Tur Ferrer, con historia; Sa Farinera, emblemático; Teixits J. Marí Serra, con historia.

Macramé Ferrer.

Actualmente, hay 28 municipios en las Islas Baleares con un total de 317 comercios catalogados. La isla de Formentera ya cuenta con ocho establecimientos, y el resto de municipios que también tienen son Alaró (4), Alcúdia (7), Algaida (5), Artà (7), Campos (16), Consell (6), Esporles (5), Felanitx (12), Inca (14), Lloseta (7), Llucmajor (10), Manacor (25), Marratxí (12), Palma (73), Pollença (9), Porreres (8), Santa Maria del Camí (15), Santanyí (7), sa Pobla (7), Selva (1), Alaior (5), Ciutadella (14), es Mercadal (1), Ferreries (11), Maó (18), Santa Eulària des Riu (5), Sant Josep de sa Talaia (5), Formentera (8).

El IDI ha editado además un manual para que sean los mismos ayuntamientos los que identifican los negocios que cumplan los requisitos por ser emblemáticos. De hecho, se han establecido una serie de categorías para unificar los criterios entre todos los participantes en el proyecto. Así, un comercio puede ser catalogado como arraigado (con un oficio o producto singular), con historia (con más de 75 años de vida como normal general, con excepciones a partir de los 50 años), y con patrimonio (con elementos arquitectónicos destacados). Los establecimientos que cumplen estas tres categorías son emblemáticos.